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No sé.
Quizás un salto mortal hacia la oscuridad absoluta.
Sin red.
Sin conexión.
Adonde los cuerpos se tocan y huelen.
Alrededor del fuego.
Donde nace la rueda que inventa cada palabra.
Allí está lo que no puedo decirte.
Aunque sea tan redonda mi boca,
rotunda y clara
como la misma luna.
Le hieren las palabras que están adentro.
El amor o la guerra.
Esta locura.
La paz.
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